Los helomas ó callos son hiperqueratosis que generan una helosis o nucleo que va produciendo un dolor
mas agudo a medida que éste se hace mas profundo.
La causa de la aparición de los helomas o callos es la presión o fricción anormal de forma continua
contra la piel del dedo contiguo o contra la piel del calzado. Esta fricción ó presión intermitente
y repetida estimula el crecimiento de la capa córnea de la piel como mecanismo de defensa.
Se ha de tener en cuenta, que al tratarse de una lesión de origen biomecánico la lesión se mantendrá en el tiempo mientras persistan las condiciones que lo originaron: calzado estrecho, deformidad de los dedos, pérdida de tejido adiposo plantar…
Deslaminado mediante bisturí, eliminación del nucleo (enucleado) y fresado.
Como medida de protección a la vez que alinean el dedo respecto a los demas, por ejemplo en los helomas blandos.
Para evitar la continua fricción por ejemplo en los helomas duros.
Que eviten o disminuyan la presión en la zona del heloma.
Estará indicado en aquellos casos en los que presistan los procesos dolorosos, exista una impotencia funcional o se puedan producir lesiones ulcerosas o infecciosas como en el caso del pie de riesgo.
Aparecen entre los dedos de los pies. La sudoración excesiva produce la maceración de la zona y el reblandecimiento de la lesión, de hay su denominación de heloma blando.
Aparecen en el dorso de los dedos a nivel de las articulaciones producidos por el roce del calzado, defectos de alineación de los dedos, en estos casos, dependiendo de la forma que adopte el dedo: en garra, en martillo o en mazo, el callo se formará bien en la articulación interfalángica próximal, en la distal o en la yema del dedo.
Se forma debajo de la lámina ungueal, a consecuencia de la presencia de una exóstosis subungueal: los fenómenos traumáticos (fricción o roce continuado) provocados por la hiperextensión de la falange distal, produce un crecimiento reactivo que da lugar a una formación cartilaginosa representando un pequeño osteocondrona.